Rápido recorrido por sus actuaciones en la desaparecida Radio Juventud y en numerosas funciones benéficas
Nadie enciende un candil para taparlo con el dornillo, suele decirse. A los artistas les encanta exponer sus obras, recrearse en ellas, recoger los comentarios del público y de la crítica. El poeta, con la varita mágica de su inspiración, nos ofrecen mundos y seres de gran belleza, creaciones delicadísimas en un celaje de ensueño. El pintor plasma con su paleta deliciosas concepciones de forma y color, imágenes que embargan el alma, ya se trata de un paisaje, un pudoroso desnudo, o simplemente, escenas costumbristas. El literato nos da la medida de su arte en la expresión de su estilo en la novela, en el drama, modelando personajes para la tragedia o la sátira humorística. Quitémosle a los artistas el placer de dar a conocer sus creaciones y habremos tapado la luz con un domillo.
En esta entrevista vamos a conocer lo que piensa y siente un humorista. Antes de empezar me gustaría definir lo que es el humorismo aunque fuese en una somera demostración, pero me resulta tan difícil como si pretendiera pescar alevines con los dedos, porque el humorismo rechaza los encasillamientos. Cada humorista tiene su propio estilo, es el creador de su escuela.
Nos encontramos en A.F.A.L. en tertulia con Manuel Gómez Sánchez "MANOLO EL CHOFER", un artista tallado en oro de ley por el desinterés y buena voluntad con que se presenta en las funciones de beneficio para que derroche su gracia con sus cuentos, chistes y recitales. Sus actuaciones son conocidas lo mismo en las emisoras de radio que en los teatros, en los hospitales rodeado de enfermos que entre ancianos de un asilo, entre niños de una escuela que en una reunión de amigos.
Existen coleccionistas de todo lo imaginable: sellos, monedas, trofeos, banderines, postales... Manolo el Chofer tiene una de las colecciones mas completas del Campo de Gibraltar de programas de funciones benéficas con su participación artística y son tantos los prospectos que Manolo merece ser calificado EL NUMERO UNO por las veces que acudió con sus chistes y recitaciones donde se hizo necesario prestar ayuda a un desgraciado o para reunir unas pesetas a fin de remediar una calamidad. Pero dejemos que sea Manolo quien nos cuente sus andanzas.
-Manolo, tu lo mismo trabajas en el teatro encamando papeles cómicos que recitas poesías, cuentas chistes y hace muchas cosas todas humorísticas, excepto las recitaciones, como artista ¿cual es tu especialidad?
- ¿Alto, ahi. amigo! Yo no soy artista —responde rápido— yo cuento chistes, recito poesías, tengo mis recursos escénicos que suelen producir buen efecto en el publico, pero no soy un artista.
-Entonces ¿que eres?
- Un modesto aficionado, un humorista con muchos deseos de quedar bien en todas partes. Hago reír y hago llorar, pero siempre como aficionado.
-Bueno, esta bien, pero cuéntame cosas...
-Mira, a mi me encanta alternar la risa con las lágrimas, dar la nota con un chiste oportuno y recitar "Los viejos estorban" o "Noche de Reyes" u otra poesía por el estilo, depende de lo que se me pida.
-¿Cuando notaste tu inclinación por lo artístico?
-Es muy difícil contestarte con exactitud, porque la afición se manifiesta con los años, conforme va uno creciendo. Pero podemos tomar casi como punto de arranque una anécdota que acusa esa inclinación. Había en la calle Buenos Aires una miserable herrería de gitanos. Durante el trabajo solía cantar el ayudante cante flamenco mientras el maestro llevaba el compás a golpe de martillo sobre el hierro candente. Era una escena sin ficción, sin artificio, flamenco puro, espontaneo, era solera de martinete.Yo permanecíacomo hipnotizado en la puerta de la herrería dejándome arrobar por el hechizo poético, incluso me brotaban sueños indefinibles. Nunca olvidaré aquellos momentos. Ahí fue donde nació mi inclinación por el arte.
-Como se te conoce mejor ¿como rapsoda o como humorista?
-Ante el público y en reuniones con amigos se me conocía como humorista, un chistoso que narraba cuentos graciosos, y nada mis. Pero eso fue el principio, después vinieron los recítales y me di a conocer como rapsoda.
-Cual fue tu primer debut como rapsoda?
-Una noche oí recitar "Penas y alegrías del amor", un disco que habia en la emisora local. Al dia siguiente en el Bar El Modelo abordé a don Javier Maestre y a Salvador Carrasco -director y locutor, respectivamente -
preguntándoles quien habia recitado la noche anterior "Penas y alegrías del amor".
-Es un disco grabado por Ulloa: ¿por que lo preguntas?
-inquirió Maestre-.
- Pues, sencillamente, porque está mal recitado, -repondi-.
-inquirió Maestre-.
- Pues, sencillamente, porque está mal recitado, -repondi-.
-Hombre, eso está bueno -respondió Maestre-, ¿serias tu capaz de recitarlo mejor?
- ¡Durmiendo! -le contesté tajante.
Maestre nunca tuvo un pelo de tonto, aprovechó la oportunidad y me comprometió para que yo demostrara lo dicho. Puso a mi disposición la emisora y me anunció para actuar el siguiente sábado en el espacio "Cara al público". Llegó el sábado, el público abarrotaba el local. Todos me conocían por mis ocurrencias humorísticas y por mis actuaciones en el teatro bajo la dirección del maestro Soro; habían acudido para reír y cuando Salvador Carrasco me presentó como rapsoda serio la gente no le creyó. La poesía con que hacia mi debut se titulaba "La nacencia de Chamizo". Empecé en un silencio espectante y conforme avanzaba recitando iba descubriendo en tos semblantes de los asistentes la satisfacción y el entusiasmo que, en el último verso, estallaron en una fuerte ovación. Seguidamente Salvador, la segunda poesía "Penas y alegrías del amor". Animado por el éxito inicial recité poniendo el alma en cada frase, en cada palabra, me embargó la emoción y terminé dando paso a la ovación mas calurosa que se ha oído en La emisora. Unos me abrazaban, otros me daban la mano o me pellizcaban la cara; todos querían exteriorizarme sus sentimientos. Aquella noche me consagré como rapsoda.
- ¡Durmiendo! -le contesté tajante.
Maestre nunca tuvo un pelo de tonto, aprovechó la oportunidad y me comprometió para que yo demostrara lo dicho. Puso a mi disposición la emisora y me anunció para actuar el siguiente sábado en el espacio "Cara al público". Llegó el sábado, el público abarrotaba el local. Todos me conocían por mis ocurrencias humorísticas y por mis actuaciones en el teatro bajo la dirección del maestro Soro; habían acudido para reír y cuando Salvador Carrasco me presentó como rapsoda serio la gente no le creyó. La poesía con que hacia mi debut se titulaba "La nacencia de Chamizo". Empecé en un silencio espectante y conforme avanzaba recitando iba descubriendo en tos semblantes de los asistentes la satisfacción y el entusiasmo que, en el último verso, estallaron en una fuerte ovación. Seguidamente Salvador, la segunda poesía "Penas y alegrías del amor". Animado por el éxito inicial recité poniendo el alma en cada frase, en cada palabra, me embargó la emoción y terminé dando paso a la ovación mas calurosa que se ha oído en La emisora. Unos me abrazaban, otros me daban la mano o me pellizcaban la cara; todos querían exteriorizarme sus sentimientos. Aquella noche me consagré como rapsoda.
- ¿Que te dijo el director de la Emisora?
-Lo encontré en la sala de control buscando el disco de Ulloa para romperlo, pero se contuvo a tiempo y lo arrinconó para siempre. Me abrazó fuertemente y ocurrió lo que tenia que ocurrir: desde aquella noche empezó mi colaboración en la emisora y en un grupo formado por Maestre y Carrasco, Angel Carpió, Julio Almagro, Jerónimo Miguel Carrasco, Miguel Angel, Paco Escobar, Toribio Hernández, Blas Fernández, Gabriel Baldrich, el maestro Jaén, Ernesto de Casas -al que se le debió la creación de la Emisora de Radio Juventud del Campo de Gibraltar en La Linea- y las siempre simpáticas locutoras Isabelita Corchete, Soledad López, Toñi, Finita y otras que no recuerdo ahora.
-Bien, ese es el principio ¿que vino después?
-Después vino todo. Salvador -ya director de la emisora- era incansable organizando espacios para la radio. Recordarás aquel que se titulo "Vale la pena ser bueno" que tuvo enorme éxito y en el que colaboré hasta el final.
-¿Tienes alguna anécdota de aquellos dias?
-Pues muchas, pero te contaré una sola. Era el día de los Santos Inocentes, sábado y tocaba el espacio "Cara al público". Sofia Loren se encontraba en Gibraltar y Antonio Machín actuaba en el Teatro Cómico. Salvador anunció que ambos artistas se presentarían en "Cara al publico". Como siempre, el local resultó pequeño, no cabia ni un alfiler más. La expectación era enorme. Y, en el momento indicado entraron los artistas famosos: Como Machín se presentó uno de la emisora que se habia tiznado la cara y manos; como Sofía Loren me presenté yo disfrazado. La sorpresa fue mayúscula y las carcajadas se oyeron a un kilómetro de distancia. Ni Carrasco ni Carpio pudieron aguantar la risa, el maestro Jaén se cayó de bruces sobre el piano. Fue una noche inolvidable.
-Fuera de la emisora ¿en que has actuado?
-Para actuar fuera de la emisora y en todos los beneficios que se organizaban en el Campo de Gibraltar y parte de la provincia de Málaga, Salvador Carrasco montó un espectáculo que se titulaba "La canción de la calle" presentando un estupendo elenco de aficionados que conquistaron fama triunfando donde quiera que actuaron.
-En cuantas funciones benéficas has participado?
-No lo se con exactitud, pero te aseguro no bajan de las trescientas, y a veces he actuado con estrellas de primera magnitud: Terol, Jarrito, Paco de Lucia, "Los Cisnes Azules" de Tarifa, etc.
-¿No has pretendido nunca formar en compañías con profesionales?
-No, pese a que reiteradamente me lo propusieron. Pero como dije antes, soy un modesto aficionado y vivo del trabajo en Gibraltar. Aparte de lo dicho me consideraba superior a muchos profesionales. Lo demuestra el hecho de que después de haber actuado en el Trino Cruz la Compañía de Antonio Mairena nos reunimos en el Café Anglo-Hispano Antonio Mairena, la Niña de Huelva, Enrique Montoya, El Trompo - bailaor-, Agustín Pol. El Poeta -tocaor de guitarra-, el Gran Dogma -polifacético- y yo, ademas los dueños del café y los camareros que a pesar de haber entregado cuentas y cerrar el establecimiento no se marcharon porque olían el desafío. En la función del teatro el Gran Dogma me habia dedicado una poesía, la recitó en mi honor. Y en el Anglo-Hispano le dije: Eso no se recita asi, esta mal. - ¿Como se recita entonces? ¿lo haces tú mejor? -me contestó el aludido. Entonces se formó el coro, y con un fondo de guitarra le recité la poesía; empecé con voz suave y lenta en principio, subiendo de tono con la cadencia de los versos, con emoción, tal como lo exige el poema, haciendo latir el corazón al compás de la frase. Desgrané la poesía verso a verso, como un rito, con ojos de iluminado y un fervor que me hacía encarnar el personaje angustiado del poema. Con la ultima frase rompió atronadora la ovación, rotunda como todas las que son hijas del entusiasma Todos los artistas me abrazaron y me dijeron:
" ¡Pero, hombre, sabiendo recitar asi ......
Las claras del día, las mujeres de la limpieza y los primeros parroquianos de la madrugada disolvían la reunión.
-Según tengo oido, eso que has referido ha ocurrido mas de una vez.
-Muchas veces, es cierto, pero ¿para que repetir?
Y aquí termina la entrevista con el pocularísimo "Manolo el Chófer", pero antes de terminar me dice: Estuve, estoy y estaré siempre a la entera disposición de quienes me necesiten para que actúe en un beneficio.
Y nada más.
Antonio Cruz de los Santos
Luis Javier Traverso Vázquez http://www.lalineaenblancoynegro.com/
Documento y Fotografías escaneadas por Luis Javier Traverso en el Archivo Municipal de La Línea de la Concepción. y
Publicado en el Extra de Feria del Periódico AREA del 13 de julio
de 1973.
Una increíble y maravillosa recopilación de fotos que me recuerdan a muchas personas con las que he convivido en alguna ocasión
ResponderEliminarEl era y seguirá siendo siempre "mi abuelo". Un ser muy especial con gran personalidad que los años no hacen más que acrecentar su valor literario, gráfico y escénico. Gracias Don Luis Javier Traverso Vázquez por la gran labor que realiza, impagable. Un saludo.
ResponderEliminarAna María Cuevas Gómez.